Los transductores de tacto delicado están diseñados especialmente para calibrar o medir superficies
delicadas, como parabrisas de coches, botes farmacéuticos, componentes electromecánicos y piezas de plástico. Un transductor tradicional ejerce una fuerza en su punta de aproximadamente 0.7 N, Los transductores de tacto delicado ejercen una presión de tan solo 0,18 N cuando se utilizan en posición horizontal. Esta reducción se consigue sustituyendo el fuelle por una unión de pequeña tolerancia dimensional. Pese al escaso volumen de flujo de aire, el rodamiento se purga constantemente, lo que evita la acumulación de polvo.
